Pack Más vale que me guste

Descripción

Aquí te presentamos este original Pack Más vale que me guste, una opción bonita y deliciosa para regalar. Llevaremos el paquete hasta la puerta de casa de la persona a la que quieras regalársela y se la entregaremos de tu parte. Este fantástico pack contiene:

• Una cerveza artesana La Socarrada de Xàtiva, Valencia. Premiada en Bélgica en ediciones anteriores del International Taste & Quality Institute (iTQi) como una de las mejores cervezas artesanas del Mundo (Peso neto: 33 cl, 6% alcohol). – Ingredientes: Cerveza premium con triple malta, de alta fermentación, estilo Winter Honey Ale, elaborada con maltas de cebada, romero y miel de romero, lúpulos y levadura.
• Una bola de queso artesano de oveja/cabra (Peso neto: 325 gramos).
• Mermelada de Tomate* de Can Moragues (Peso neto: 170 gramos). – Ingredientes: Tomates frescos ecológicos de la variedad Pebroter (mínimo 40%), azúcar ecológico de caña, tomillo fresco ecológico, pectina de cítricos y limones ecológicos.

*Los productos pueden ser reemplazados por otros similares en función de la temporada y la disponibilidad, previa consulta al cliente.

Contenido extra del Pack Más vale que me guste

• Una tarjeta de presentación de Gastroidea.com y del Pack.
• Un cupón de regalo con descuentos para próximas compras.

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Información de entrega: Todos los packs se entregan dentro de una caja con formato estándar como embalaje de seguridad. Este embalaje protegerá el paquete original de cualquier inconveniente que se produzca durante el transporte, para que todo el contenido llegue a su destino en perfecto estado, especialmente botes y botellas de cristal.

Información legal: Conforme a la ley vigente 11/2010, de 17 de Diciembre, queda prohibida la venta de bebidas alcohólicas a menores de 18 años. Si no tienes mayoría de edad no puedes comprar este pack (Lee las Condiciones legales).

Curiosidades e historia

Geraldine Hoff Doyle, fallecida en diciembre de 2010, descubrió al leer una revista que una foto suya fue la que había inspirado el cartel pop en el que aparece una chica con el gesto decidido. Con el pelo recogido bajo una cinta roja y subiéndose las mangas de la camisa mostrando sus músculos. Tenía 18 años cuando le hicieron la imagen y trabajaba como planchadora de metal en la fábrica American Broach & Machine Company. Era un empleo en el que estuvo apenas dos semanas por miedo a lesionarse. Ella era música, tocaba el chelo, y no nació precisamente con la voluntad de empoderar a la mujer. Del dibujo que inspiró sólo era suyo el rostro, no el cuerpo. «No tenía unos brazos grandes, musculosos», explicaría su hija a su muerte. «Ella era muy delgada, una niña glamourosa. Las cejas arqueadas, labios bonitos…».

Un fotógrafo de United Press International que estaba haciendo un reportaje en la fábrica donde estaba Geraldine la retrató en plena faena. Poco después, la compañía estadounidense Westinghouse Power Company, empresa manufacturera americana encargada de elaborar suministros para la aviación, encargó en 1942 al artista J. Howard Miller que reflejara de alguna manera la importancia de que las mujeres acudieran a trabajar. Querían hacer campaña para contener las posibles huelgas de las trabajadoras. Querían alentarlas a no faltar en sus puestos ante la falta de mano de obra en tiempos de guerra. Era un momento en que muchos hombres estadounidenses habían abandonado sus puestos de trabajo para partir al frente (la propaganda fue, de hecho, bastante efectiva; de 1941 a 1945 el porcentaje de mujeres trabajadoras en EE UU subió del 27 al 37%). Leer más.